Tras el paro invernal, el tráfico de cruceros en Vigo inicia una nueva singladura que devolverá a la estación marítima la habitual estampa de los grandes cruceros atracados y el bullicio y la animación a los aledaños portuarios.

Superados casi tres meses sin contar con la presencia de un solo crucero, la actividad arrancará el próximo día 3 con los primeros 700 cruceristas que arribarán a Vigo de la mano del veterano Black Watch, al que seguirá el día 8 el Ventura, primer mega-crucero de la temporada que se espera con más de 3.000 pasajeros a bordo.

Al día siguiente nos aguarda el primer estreno de la temporada. Se trata del Britannia, nuevo buque-insignia de la P&O que acaba de rendir en Southampton su viaje inaugural a puertos del Mediterráneo. Este buque fue bautizado el pasado 10 de marzo por la reina Isabel II y su construcción en astilleros de Fincantieri (Italia), ha supuesto una inversión de cerca de 700 millones de euros. Con un arqueo bruto de 143.730 toneladas, el Britannia puede acoger en sus 330 metros de eslora por 44 de manga y 15 cubiertas a un total de 4.324 pasajeros y 1.398 tripulantes.

Y tras la primera sensación de la temporada, dos semanas más tarde nos aguarda la segunda, a cargo del Anthem of the Seas, la nueva joya de Royal Caribbean que llega a Vigo en su viaje de estreno para inscribir el nombre de la ciudad en sus registros como su primer puerto de escala.

Tras la mediática visita de estos dos gigantescos cruceros, la actividad proseguirá en la Estación Marítima con un nuevo atraque del Ventura previsto para el día 27. El último barco del mes será el Braemar, que se espera el día 29. En total estas seis escalas acercarán a la ciudad a más de 15.000 pasajeros y 5.500 tripulantes. Con la llegada de mayo, la temporada alcanzará uno de sus picos anuales con 15 escalas y visita de más de 45.000 personas entre pasaje y tripulaciones.

Atraque inédito en el Areal

Por otra parte, la Autoridad Portuaria volvió ayer a resaltar la importancia de la ampliación del muelle de Areal, esta vez a propósito de la escala del Cypress Arrow. En un comunicado asegura que este buque, de 13 metros de calado, sería imposible que atracase en esta terminal sin la citada reforma. "Los trabajos de mejora en Areal garantizan que cualquier barco con mercancía general de más de 10 metros de calado pueda operar en este muelle sin tener que hacerlo en Guixar, como sucedía hasta el momento", enfatiza el puerto que justifica la obra asegurando que un muelle con tan poco calado era prácticamente inoperativo. "Además, entre los almacenes y el cantil del Muelle apenas había espacio disponible para depositar la mercancía", sostiene la nota portuaria.