El mural del Nelson Villalobos en Martínez Garrido encara la recta final de su instalación después de que ayer quedasen colocadas las esculturas que complementarán la intervención artística que lucirá la nueva plaza de esta calle.
De 56 metros de longitud y tres de alto, la obra de Villalobos en Martínez Garrido se convertirá en el mayor "fresco" urbano de la ciudad. Su montaje arrancó el pasado día 9 con la sujeción de seis de los treinta paneles metálicos pintados a pincel y brocha que conforman un mural colorista concebido en homenaje al alcalde fusilado que da nombre a la calle y a otros dirigentes represaliados durante la Guerra Civil. Es una obra que apuesta por la diversidad y la igualdad. Por la tolerancia y el valor de la democracia.
Junto a sus colaboradores Carlos, Eligio y Julio, el artista cubano afincado en Vigo se encargó de diseñar también la parte artística que lucirá el nuevo espacio y que se inaugurará en los próximos días.
Así, a los llamativos paneles que conforman el mural hay que sumar una gran escultura metálica que presidirá el espacio y otras de menor tamaño que simulan una figura humana con el rostro hueco para que los visitantes de esta plaza puedan retratarse. El pavimento e incluso las jardineras también mostrarán el sello inconfundible de Villalobos.
