Nelson Villalobos, artista cubano afincado en Vigo, sabe ponerle color a las adversidades de la historia. A través de treinta paneles pintados a pincel y brocha en la nueva plaza de Martínez Garrido, el artista ha retratado a través de símbolos y color los fusilamientos políticos cometidos durante la Guerra Civil, en especial el de Emilio Martínez Garrido. "Yo no quiero plasmar la muerte de Garrido, sino su alegría", cuenta el artista que ha buscado su inspiración en un pentagrama donde las figuras consiguen la universalidad y con el color "la identificación de todas las personas".

"Yo tengo la idea de que el mundo hay que embellecerlo, incluso lo trágico", afirma contemplando su obra, que conforma el mayor mural de Vigo, con 56 metros de longitud y tres de alto.

El Concello financia la nueva plaza con un presupuesto de 290.000 euros, con el que Villalobos se ha encargado del mural además de diseñar la parte artística de todo el conjunto. Este incluye una gran escultura, pavimento con siluetas, decoración en jardineras y otros motivos en diferentes elementos.