El nombre de Elena Muñoz, conselleira de Facenda suena cada vez con más fuerza en las quinielas de candidatables. A su favor tres factores: el primero que con ella el PP gallego podría escenificar esa idea de renovación que busca transmitir; el segundo, que es una mujer, con lo cual ese principio renovador se vería reforzado; y el tercero, que es de la confianza del presidente de la Xunta.

La propia conselleira contribuye a alimentar sus opciones cada vez que se le pregunta en público. Ayer mismo, rehusó descartarse como aspirante. "En este momento lo que puedo decir es lo que hay: un proceso de decisión que no me corresponde a mí, sino al partido y al presidente, y cuando ellos decidan, se dirá", aseguró en Santiago.

Reproduciendo casi literalmente la coletilla que desde hace semanas repite Alfonso Rueda, número dos del PPdeG, cuando se le cuestiona sobre esta asunto, Muñoz se mostró "convencida de que la elección que hagan será la mejor para todos los vigueses y viguesas".

Sin embargo, en ningún momento, Muñoz se refiere al papel que podría o debería tener el PP vigués, la militancia y su dirección, en esta decisión. A su juicio, todo pasa por Feijóo.