Música, animación y luz. Mucha luz. El espíritu navideño inunda desde ayer cada rincón de Vigo. Y lo hace de forma deslumbrante. En particular en el corazón de la ciudad, donde el alcalde, Abel Caballero, inauguró la Navidad olívica encendiendo el árbol de 27 metros de altura instalado en Porta do Sol y que dejó boquiabiertos a pequeños y mayores. "Éste es el árbol que nos identifica como ciudad. Alto, grande, con luz y lleno de entusiasmo. Queremos que esta época de maldita crisis se vaya de una vez y por eso deseábamos que estas fiestas navideñas fuera especiales", resaltó antes de encenderlo tras una cuenta atrás coreada por una plaza abarrotada de familias.

El grupo Ladibain amenizó la fiesta con villancicos. "¡Qué linda está la ciudad!", aplaudía Luci y su hija Luna acompañadas de su perra Luna. Y es que este año las bombillas iluminan casi el doble de calles que el año pasado. "Los adornos y las luces contribuyen a animar mucho el ambiente y estamos seguro que también el consumo. Quizás hasta es un buen remedio para cambiar el chip en época de crisis e incentivar las compras y levantar el ánimo", decían el matrimonio Carolina y Jorge con sus "peques" Nicolás y Alicia en brazos.

Y es que el Concello no solo ha multiplicado el número de viales iluminados, sino que incluso ha adelantado el encendido navideño una semana. Estaba previsto para el pasado viernes, pero el fatal atraco en O Calvario obligó a retrasarlo. "El árbol es enorme y precioso. Es lo que más nos gusta", resaltaban al unísono las jóvenes Carla y Silvia, de 8 y 11 años, acompañadas de su tía Noelia. Y es que las 96.000 microlámparas led de las que presume no pasaron desapercibidas y fuero el objetivo indiscriminado de todos los flashes. Tanto desde fuera, como desde dentro, ya que los vigueses pueden acceder a su interior.

Pero no solo de luz "vivirá" la Navidad olívica. Durante las próximas seis semanas están programadas hasta 60 actuaciones musicales y de animación por toda la ciudad.

Un Papá Noel escalador

Y si uno de los epicentros estuvo en Porta do Sol, el otro fue en Gran Vía. El Corte Inglés también realizó su tradicional inauguración de la Navidad y cientos de personas colapsaron la zona. Fue necesario incluso cortar el tráfico. Duendes, malabaristas y músicos actuaron e hicieron las delicias de los más pequeños en un espectacular puesta en escena. Minutos más tarde, Papá Noel se descolgó por la fachada de la superficie comercial ante el asombro de los presentes. El jugador celeste Hugo Mallo y el guitarrista David Russell pusieron la guinda de la fiesta y se encargó de activar la iluminación.