Pese a no notarse en las estadísticas, las tasas son un escollo para muchos ciudadanos. Como para Celso Penedo, de 96 años, y María Penín, de 84, matrimonio que sobrevivió al derrumbe del edificio Odriozola, hace 15 años, y que pidió justicia gratuita para reactivar este caso en la vía civil, ya que el fallo penal fue absolutorio. Pero la Xunta le deniega la justicia gratuita -por unos ahorros que tienen pese a que por sus pensiones reúnen los requisitos- y ayer hubo un juicio en el que pidieron al juez que revoque esta decisión. Si no le otorgan el beneficio, deberán pagar casi 6.000 euros de tasas para presentar la demanda.
