El Gobierno portugués volverá a impulsar el desarrollo se su infraestructura ferroviaria a partir del próximo año. Y lo hará, en el caso de la conexión con Galicia, culminando la electrificación de toda la línea para permitir que el tren entre Vigo y Oporto -el único que une Portugal con la comunidad gallega- pueda cubrir el trayecto en hora y media frente a las más de dos horas actuales. Este fue el anuncia que realizó en una entrevista a EFE, el secretario de Estado de Infraestructuras, Transportes y Comunicaciones, Sérgio Silva Monteiro.

Según citó el responsable luso, el Gobierno considera "prioritaria" la inversión en la mejora de las conexiones ferroviarias con España a partir de 2015, año en que comenzarán las obras en suelo portugués de la línea "de altas prestaciones" Madrid-Lisboa que prevé terminar en 2019. Tres años antes, en 2016, espera que esté operativa la línea Oporto-Vigo, también incluida en su lista de prioridades, pero que no será de alta velocidad, ya que se trata de un proyecto ya descartado.

El responsable luso avanzó que el Gobierno portugués está ya trabajando en mejorarla. "Ya estamos electrificando la línea del Miño, con presupuesto atribuido (...) Su principal ventaja es que con el mismo tipo de tren, podremos reducir el tiempo en 40 minutos -de las dos horas y cuarto actuales a poco más de hora y media- e incluso recortar los costes de combustibles, lo que teóricamente nos permitiría incluso bajar el precio del billete", avanzó.

Monteiro puntualizó que el país no puede volver al gasto excesivo para convertirlo "en un estímulo artificial de la economía", y defendió que sigue siendo necesario "ahorrar mucho dinero para invertir un poco en infraestructuras importantes para el futuro". "No podemos confundir a los contribuyentes diciéndoles que las dificultades ya están superadas y que ahora es tiempo sólo de invertir", recalcó.

El Gobierno español ya manifestó su compromiso de electrificar un pequeño tramo que queda en el lado español cuando Portugal lo hiciera para que toda la línea a Oporto lo esté.

"Si tuviésemos el transporte de pasajeros como primer objetivo, habría ventajas en pensar en una conexión por AVE porque reduciríamos el tiempo de conexión con Madrid. Pero no es el caso, no sólo no tenemos el dinero sino que nos parece que el hincapié hay que hacerlo en las mercancías", explicó Monteiro en relación a la alta velocidad entre Lisboa y la capital española. Los costes del proyecto actual son tres veces inferiores al del AVE y para Portugal "no compensa tener un poco más de velocidad" a ese precio, dijo.

La victoria electoral de los conservadores sucedió a la petición del rescate financiero a la UE y el FMI, que concedieron su ayuda a Portugal a cambio de un severo programa de ajustes y reformas que obligó a recortar la inversión hasta "niveles anémicos".