La Corporación da luz verde a las ordenanzas fiscales de 2015 con una congelación global de los impuestos y tasas municipales y rebajas específicas en los tres tributos más cuantiosos. El IBI y la basura se reducen un 1,4% y en el caso del rodaje se aplica un recorte del 2% en las tasas para vehículos de menor cilindrada y del 1% para los de entre 12 y 15,9 caballos fiscales. Socialistas y populares validaron ayer el contenido del pacto presupuestario que permitió aprobar las cuentas de 2014 y aprobaron juntos la previsión de ingresos del próximo ejercicio que será la que finalmente determine la capacidad de gasto del gobierno local. El BNG se desmarcó en la votación al defender rebajas fiscales progresivas y en función de la renta en lugar de aplicarlas de forma universal.

El acuerdo entre PSOE y PP también implica la puesta en marcha de un plan de pago a plazos que permite a los contribuyentes abonar sus obligaciones en diez cuotas de febrero a noviembre sin intereses y sin limitaciones de renta.

La edil de Facenda, Carmela Silva, fue la encargada de defender el contenido de las que definió como "las ordenanzas fiscales más sociales de la historia de Vigo", destacando el aumento de personas que estarán exentas del 90% del IBI y la tasa de recogida de la basura, así como la aplicación de una segunda bonificación en la denominada contribución para familias numerosas. La socialista subrayó que se trata "de un acuerdo histórico. La presión fiscal disminuye para el conjunto de la población y de forma significativa para los colectivos vulnerables", por eso cargó las tintas contra sus exsocios de gobierno del BNG al conocer su voto en contra: "Tienen muy difícil explicar su rechazo cuando estas ordenanzas son más beneficiosas que las que ustedes apoyaron durante cinco años". Sumando el 1,4% de rebaja a la inflación, el gobierno cifra en hasta un 3,2% la rebaja.

En lo que no hubo acuerdo con la bancada popular es a la hora de repartirse el mérito. Silva defendió que la rebaja fiscal -la primera desde que en 2010 se aplicó un 0,2%- es consecuencia "de una buena gestión económica del gobierno local", mientras que desde el PP, Miguel Fidalgo atribuía el cambio "al trabajo serio del PP de Vigo en la oposición". "Es la primera vez que bajan los impuestos en ocho años. Se nos acusó de querer quebrar el Concello y el alcalde intentó torpedear esta rebaja, pero ahora lo único importante es que se cumplieron nuestras exigencias y 140.000 hogares disfrutarán de una rebaja real". Fidalgo tendió la mano al gobierno para seguir negociando en materia económica.

La portavoz del BNG, Iolanda Veloso, rechazó las ordenanzas fiscales aprobadas ayer inicialmente porque entiende que suponen "la aplicación en Vigo de las políticas económicas del PP". Criticó el pacto presupuestario porque "rebaja los impuestos a un BMW de más de 50.000 euros mientras sigue sin ponerse en marcha un bonobús para desempleados". El Bloque reclamó una política de rebajas fiscales progresiva y que atienda a criterios de renta.