Tras las manifestaciones realizadas el miércoles por el Partido Popular, que criticaba la prolongación de la concesión del antiguo Jonathan hasta el año 2044, ya que suponía hipotecar la playa de Samil e imposibilitar cualquier intento de regenerar la zona, el alcalde de Vigo, Abel Caballero replicó la postura del grupo popular, recordando que el Gobierno de España, presidido por Mariano Rajoy, congeló el proyecto de regeneración de Samil que se había acordado entre el Concello de Vigo y la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, durante la segunda legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno.

"Samil no se hace porque el Gobierno de España congeló el proyecto y el PP tiene la desvergüenza política de hablar de esto cuando fueron ellos los que lo pararon", comentó Caballero, que añadió que lo único que le preocupa de lo que diga el grupo popular vigués es que "le digan al Gobierno de España que recuperen el proyecto".

El alcalde olívico tasó en 19.463.000 euros la inversión que se iba a destinar a la regeneración de Samil en el proyecto que asumió Espinosa, que suponía retranquear el muro del paseo unos 12 o 15 metros, ganar más o menos la misma cantidad de playa y restablecer el mobiliario urbano.

"La regeneración de Samil no se hace por que el Gobierno canceló el proyecto. Lo único que nos importa es que el PP vaya y les convenza de recuperarlo y ponerlo en marcha, el resto nos da igual", indicó Caballero, en referencia a las palabras de la concejal popular Teresa Egerique en las que instaba al regidor a hacer más caso a las propuestas del PP.

Asimismo, cuestionado sobre si una hipotética recuperación del proyecto sería frenada por la ampliación de la concesión del antiguo Jonathan, el regidor vigués fue tajante al declarar que no sería problema para ponerlo en marcha.

"Que pongan el dinero y mañana mismo recuperamos el proyecto. Si ponen los 19 millones, comprometo la recuperación de ese espacio porque en la concesión está prevista. Vuelvo a insistir en que pongan el dinero que le están quitando a Vigo y poniendo en otros sitios de Galicia", concluyó el alcalde vigués.