Esta química teórica plantea que para resolver nuestros problemas energéticos pueden resultar interesantes los subproductos de la industria de la biomasa, que desechamos como residuos. Por ello, en su grupo usan herramientas computacionales -mecánica cuántica- para conocer las reacciones químicas de estos productos a nivel molecular y, con estos datos, diseñar catalizadores para transformar residuos en materiales útiles para la industria. "La ayuda es un empujón muy importante cuando el grupo está consolidándose y poder pujar así a nivel internacional", aplaude. Invertirán el dinero en comprar servidores y contratar a un estudiante de doctorado.