La Junta de Gobierno local del Ayuntamiento de Vigo ha aprobado el proyecto de obras y reforma de la grada de Río y consolidación estructural del estadio municipal de Balaídos, que contará con un presupuesto de 4,2 millones de euros.

Las obras comenzarán antes de que finalice el año, según las previsiones del gobierno local.

Así lo ha anunciado el alcalde de Vigo, Abel Caballero, en declaraciones a los medios esta mañana, y ha explicado que la aprobación de la reforma, que se producirá en dos fases, demuestra que el proyecto es ya "una realidad" tras 35 años en los que los distintos equipos de gobierno "miraron para otro lado" y a los que pide "responsabilidades".

La primera de las fases estará centrada en el refuerzo estructural de los contrafuertes exteriores de la grada Río, la sustitución de su cubierta y el acondicionamiento general del estadio, acciones para las que se ha destinado una partida de 1,7 millones de euros.

Durante la segunda fase, se acometerán las obras de renovación de la fachada, acondicionamiento general, recorridos de evacuación y reparaciones estructurales en el interior de la infraestructura, todo ello por un importe de 2,6 millones de euros.

Caballero ha destacado la "gran cohesión y camino conjunto" que el consistorio vigués ha recorrido con la directiva del Real Club Celta de Vigo para actuar "de forma coordinada" y conseguir así mejorar zonas del estadio, como los accesos a la grada Río, de los que afirma "siento vergüenza como alcalde".

Además, ha dado la bienvenida a las instituciones "que se quieran sumar" a este proyecto "colectivo", aunque ha advertido que la Diputación de Pontevedra será "obligada" a participar por la ciudad que actualmente "no puede ver" al organismo provincial ya que "la tiene marginada".

Al margen de la colaboración de la Diputación, que el regidor vigués valora "debería estar en el entorno de los 30 millones", ha anunciado que mantendrá conversaciones con la Xunta de Galicia, el Consorcio Zona Franca de Vigo y el Consejo Superior de Deportes para poder realizar "una gran reforma".

Según ha detallado, el Ejecutivo gallego deberá cooperar "al menos en un 10%, al igual que hizo en el estadio pontevedrés de Pasarón".