La vigilancia contra el trapicheo de drogas incorpora una agente especial: "Juno". Esta ejemplar de la raza perro de agua español, que puede olfatear una amplia gama de sustancias, -desde hachís y marihuana hasta cocaína y heroína-, inaugurará la unidad canina de la Policía Local de apoyo para la detección de estupefacientes.

"Juno" tiene cinco años y, a la hora de localizar drogas, se encuadra en la categoría de perros pasivos. "En el ámbito de la detección se distinguen sabuesos activos y pasivos. Los primeros cuando encuentran algún estupefaciente rascan con las patas el lugar exacto. Los segundos tocan con la nariz la zona sospechosa y se sientan", explica su adiestrador, el agente R.S (que prefiere no desvelar su nombre). De este modo se evitan daños que, por ejemplo, en el registro de un automóvil, "tendrían que ser reparados y sufragados por la policía".

La patrulla canina hará un trabajo preventivo. Su principal objetivo es facilitar las tareas de los policías en lo que concierne el registro de vehículos, "así como el merodeo en diversos lugares", explica el adiestrador junto a su perro.

Las posibilidades que ofrece "Juno" a la hora de acometer registros o inspecciones no las puede aportar un humano. "Detecta cuatro sustancias pero en la práctica puede reconocer más", cuenta el entrenador. "Si una persona tira al suelo su droga antes del examen policial, el perro sí será capaz de localizarlo gracias a su olfato", añade el guía.

La brigada no solo patrullará las calles, sino que tendrá un cometido pedagógico. "Se pretende efectuar una labor social a través de charlas y exhibiciones en colegios. El fin es concienciar a los más jóvenes sobre el grave problema de las drogas", añade el agente. Se tratará de una dotación exclusiva en la seguridad local de Galicia.

La elección y el adiestramiento de los animales han de ser minuciosos. "Los miembros de la sección perruna están súper socializados y acostumbrados a trabajar en situaciones que engloben a mucha gente", indica. "Únicamente se activan cuando se les da el comando. A partir de ahí, ellos buscan y cumplen con su cometido por su premio", precisa.