El presidente de la Xunta defendió ayer en Madrid un nuevo modelo de Justicia que atienda a las circunstancias de cada territorio. Entiende Alberto Núñez Feijóo que solo bajo esta premisa se puede garantizar una Justicia "única e igual para el conjunto del Estado". El dirigente popular reconoció la urgencia que requiere modernizar el sector durante la celebración del 25 aniversario de los tribunales superiores de justicia en la sede del Consejo General del Poder Judicial, que hace apenas tres días emitió un informe muy crítico con la reforma de Gallardón y demandó al Gobierno central la posibilidad de mantener una sede judicial propia en ciudades que como Vigo tienen abundante población y peso económico aunque no sean capitales de provincia.

Sentado al lado del presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, Feijóo intervino para destacar su convencimiento de que "si deseamos una Justicia viva y verdaderamente útil para los administrados, es necesario adaptarla otra vez a la realidad de los tiempos. A la hora de establecer su estructura, la organización judicial no puede perder de vista las referencias sociales, económicas, demográficas y políticas de cada territorio", manifestó ante un amplio auditorio.

Esta fue la ocasión en la que de forma más explícita Feijóo abordó la polémica reforma del mapa judicial que amenaza con dejar a Vigo como sede desplazada del Tribunal Provincial de Instancia de Pontevedra. Aunque no mencionó de forma explícita el caso de Vigo, el presidente de la Xunta validó sus argumentos de diseñar un modelo basado en datos objetivos. También advirtió que al margen de los cambios de distribución, es necesario profundizar en la modernización y redoblar esfuerzos "para reducir la carga de trabajo, agilizar los procedimientos y descongestionar este servicio público".