-¿Como vocal para Galicia presentará enmiendas para reclamar la excepcionalidad de Vigo?

-No cierro la puerta a ninguna posibilidad razonable y motivada y todo es susceptible de volver a valorarse. Esta es la fase en la que nos encontramos y en este momento lo que no puedo es decir cuál va a ser mi posición definitiva en esa sesión plenaria porque ahora son días de análisis y reflexión más sosegados. Es posible plantearse esta posibilidad.

-¿Aprovechará hasta el día 26 para mantener reuniones con representantes de la judicatura gallega o encargará nuevos informes?

-Bueno. Se están estudiando todos los informes recibidos y se prestará una especial atención a todo lo que tiene que ver con Galicia. También lo que nos ha llegado desde el alcalde de la ciudad con consideraciones que tendré que examinar.

-En los últimos meses quedó claro que el caso de Vigo no puede compararse con ninguna otra ciudad. Cinco veces más asuntos que la capital, único partido judicial que sin ser capital se cuela entre los 20 de mayor actividad y tamaño. ¿No es suficiente para justificar una sede autónoma?

-Los cambios hay que hacerlos para mejorar. Y dicha esta obviedad hay que buscar un sistema de organización versátil, que se acomode bien a las necesidades de cada comunidad y hay que contemplar la posibilidad de establecer excepciones a la regla general atendiendo a esas peculiaridades. Hay un sistema general que establece unas líneas maestras que creemos que pueden ser buenas y ahora es el momento de pensar si esas situaciones singulares tienen que aparecer reflejadas en el informe o no.