Como preludio de las procesiones que comenzarán hoy, la Cofradía de Nuestro Padre Jesús del Silencio celebró ayer su tradicional ofrenda floral a la Virgen de la Amargura, en la parroquia de Santiago el Mayor. La diputada popular Irene Garrido Valenzuela se encargó del homenaje a la Santa con "responsabilidad y orgullo". La también profesora en la Universidad de Vigo, en nombre de las mujeres de la ciudad, pidió "entereza para los compromisos futuros" y "fortaleza" para seguir estando "comprometidas en la lucha por el cambio hacia una sociedad más justa y fraternal". Apelando a su condición de madre, rogó a la Virgen que ayude a las viguesas "a consolar y proteger" a quien lo necesite en estos momentos de crisis. "Ayúdanos a asumir con fe todos los problemas", imploró.

La eucaristía, finalmente, no pudo ser oficiada por el obispo de la diócesis Tui-Vigo, Luis Quinteiro Fiuza, como estaba previsto.