Y el lugar elegido es... Real 27. La Universidad de Vigo desea recuperar cuanto antes su sede en el centro de la ciudad y está dispuesta a acelerar la apertura de su nueva "casa" en el Casco Vello. Ocho años después de que cerrase sus oficinas en la calle Areal (abiertas en 1992), el rector ha intensificado las gestiones para cumplir con una de las promesas realizadas cuando llegó al cargo en 2010. Tras varios años de búsqueda, Salustiano Mato parece haber encontrado el lugar idóneo para acercar el campus a la ciudad y se ha decantado por un inmueble amplio, lo que permitiría acoger el Centro de Linguas, y bien situado, puesto que se encuentra en un sitio privilegiado del remozado barrio histórico.

El edificio de Real 27 es actualmente propiedad del Consorcio del Casco Vello y se quedó a última hora fuera del proyecto de rehabilitación de los Registradores de la Propiedad (Real 29, 31, 33 y rúa Alta 26), a punto de concluir. El inmueble se incluía en el acuerdo firmado en 2007, pero finalmente fue descartado en 2011 al reducir el presupuesto. Ahora, la nueva dotación universitaria completaría la reforma integral de la plazoleta que comunica Real con la zona de Chao por la Travesía da Esperanza. Construido en el siglo XIX y de estilo vilego, la casa dispone de 1.285 metros cuadrados repartidos en cuatro alturas, una superficie suficiente para dar cabida a las oficinas universitarias. El Plan Especial de Reforma Interior (Pepri) del Casco Vello permite su reforma para dotaciones de servicios y nuevas instalaciones. Incluido en el catálogo de protección -la rúa Real fue declarada Bien de Interese Cultural (BIC) en 1946- y con un alto interés urbanístico, una parte de la construcción ya se ha vaciado y está pendiente de reforma.

Las negociaciones entre la Universidad y el Consorcio Casco Vello están avanzadas y en las últimas semanas se han reunido Salustiano Mato y la presidenta del organismo, María José Bravo Bosch, acompañados del vicerrector de Infraestructuras y el gerente del consorcio.

Tal y como avanzó Bravo Bosch el pasado jueves en un foro de Urbanismo en el Club Financiero, la propuesta del rector es una cesión del edificio a "coste cero", posibilidad que la propia presidenta descartó. Los Registradores llegaron a pagar 3,3 millones por sus nuevos edificios y este cuarto inmueble estaría valorado en otro millón de euros. Los contactos continuarán en las próximas semanas para llegar a un acuerdo.

La opción de que el Concello de Vigo cediese un edificio a la Universidad, tal y como habían acordado en varias reuniones alcalde y rector, parece ahora totalmente descartada por la falta de un inmueble municipal que se adapte a las necesidades.