Charlotte Goiar, la paciente que ha logrado tras seis años de batalla legal una sentencia del TSXG -ratificada por el Tribunal Supremo- que obliga al Sergas a operarla de reasignación de sexo, continúa su andadura judicial.

La última resolución del juez de Vigo es un jarro de agua fría. La paciente le pedía que fijase un "plazo máximo" a Sanidade para la valoración previa a la cirugía y que esta se realizase en un hospital público de Barcelona. El juez ha resuelto que la Administración sanitaria no puede poner un plazo, pero en el hospital andaluz Carlos Haya -a donde fue derivada para valoración- porque este no depende del sistema público gallego. No obstante, el magistrado solicita que el Sergas acredite de forma puntual y luego quincenalmente las gestiones para agilizar la consulta en dicho centro. Charlotte avanza que presentará un recurso al TSXG para que la valoren en el Clínic de Barcelona.