Un año y medio de prisión y otros dos años de alejamiento con respecto a la víctima. Ésta es la condena que aceptó ayer en la Audiencia viguesa Juan P.L. por intentar atacar con un cuchillo de monte a otro varón en el piso de la calle Ecuador donde ambos tenían habitaciones alquiladas. La conformidad alcanzada entre fiscal y defensa evitó la celebración del juicio y supuso además para el acusado una notable rebaja con respecto a la pena a la que se enfrentaba inicialmente, que era de tres años y medio de cárcel por un delito de tentativa de homicidio.

Los hechos sentenciados ayer en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra ocurrieron el pasado verano. Concretamente el 8 de julio de 2013. Apenas faltaban unos minutos para las siete y media de la tarde cuando Juan P.L. se encontró con la víctima en el salón. En ese momento, según el relato de hechos que consta en el escrito de acusación de la Fiscalía, el ya condenado cogió un cuchillo de monte y, tras hacerle un gesto de cortarle el cuello, se echó cara a su compañero de piso con la intención de agredirlo. Pero ni siquiera lo llegó a tocar porque la esposa se interpuso, evitando el ataque y posibilitando que la víctima pudiese refugiarse en su habitación.

Puerta

Pero el altercado no cesó ahí. Mientras el perjudicado llamaba a la Policía, el procesado empezó a dar patadas en la puerta de su habitación, causando un enorme agujero. Sin embargo, no llegó a entrar en el dormitorio donde se refugiaba la víctima y, a la llegada de los agentes, fue arrestado. En presencia de los efectivos policiales, prosigue el escrito de la Fiscalía, profirió amenazas de muerte contra el hombre con el que compartía piso, manifestando que si bien él habría acabado en la cárcel de A Lama, a la víctima la habría envidado "al cementerio". El condenado cuenta con antecedentes cancelables por tráfico de drogas.