Las mejoras que experimentó a principios del pasado verano el tren Vigo-Oporto tienen ya su reflejo en la demanda del servicio. Según los últimos datos facilitados por la operadora lusa Comboios de Portugal (CP) el tren desplazó entre julio y octubre a 19.900 pasajeros. La cifra supera a los 15.000 viajeros que, por término medio, usaban la línea ferroviaria a lo largo de un ejercicio antes de las mejoras.

A principios de julio el rebautizado como tren "Celta" suprimió las 14 paradas intermedias que, hasta la fecha, realizaba entre Guixar y la estación portuense de Campanha. Esa medida le permitió cubrir los 160 kilómetros que distan hasta la urbe del Duero en 2 horas y 15 minutos, casi una hora menos de lo que consumía el ferrocarril hasta esa fecha. Con esos resultados el convoy se convirtió, por primera vez en décadas, en una alternativa atractiva frente al autobús o incluso el coche particular. Su precio tampoco se vio alterado: el billete de un viaje entre Vigo y Oporto asciende a 14,75 euros, tarifa que se rebaja con pases "senior", joven o infantil.

"La creación de este enlace directo motivó un aumento de viajeros", explican desde CP a la agencia de noticias Lusa. Las prestaciones del tren "Celta" podrían mejorarse con la electrificación del tramo portugués Nine-Valença do Minho, lo que según las primeras estimaciones incrementaría hasta en un 50% la demanda y la dejaría en cerca de 30.000 viajeros al año. El objetivo final es enlazar Vigo y Oporto en 2016 en 90 minutos.