Cuando, hace seis años, el profesor Fernando Aguado recibió una llamada de una antigua alumna suya, Estefanía Sarmiento, desde el Instituto Nacional de Técnicas Aeroespaciales (INTA), apenas sí podía creer lo que se le estaba proponiendo: ni más ni menos que una invitación oficial a participar en un concurso convocado por la agencia Espacial Europea para el diseño y fabricación de un satélite. Aguado ya había comenzado a trabajar en Vigo en proyectos aeroespaciales desde 1996, pero hasta aquel entonces estos se habían limitado al diseño y fabricación de partes específicas de los satélites, no de un satlélite completo.

--- NO TOCAR ---

----------------

Siga leyendo la noticia en Orbyt, o suscríbase a Faro de Vigo y tenga acceso completo a todas nuestras noticias sin límites.