La posibilidad de recibir el cheque social que por primera vez oferta el Concello para personas en situación de necesidad -a través de un fondo dotado con casi 2,5 millones de euros- ha provocado una riada de solicitudes en la sede de Praza do Rei. Miles de personas pasaron esta semana por las ventanillas de la lonja en las que se informa sobre las condiciones para obtener la ayuda, y hasta ahora han entregado la documentación requerida por registro, según los datos municipales, más de 730 demandantes.

El plazo arrancó el día 6 y hoy ha superado su ecuador, ya que expira el sábado próximo. El ritmo de presentación de solicitudes ha sido creciente. Las primeras jornadas los interesados acudían mayoritariamente a informarse y los tres funcionarios que se encargaban del servicio acabaron desbordados en los picos de las colas, lo que obligó a reforzar la atención con personal de Tesorería. La presentación de solicitudes aumenta a medida que pasan los días. El viernes se registraron 262.

La previsión con la que nació la subvención municipal era la de alcanzar las 2.000 familias, pero la cifra podría quedar ampliamente superada ante la demanda ya constatada durante estos ocho primeros días. El cheque se entregará a todo aquel que cumpla las condiciones de la convocatoria en un único pago y la cuantía es, a día de hoy, indeterminada, ya que depende del número de peticiones aprobadas. La ayuda se dividirá a partes iguales: cuantos más beneficiarios menor importe. Sea como fuere el cheque representará un importante apoyo para familias en situación de gran necesidad. Aunque se alcanzasen las 4.000 solicitudes autorizadas la subvención superaría los 600 euros, un dinero muy valioso para personas con escasos recursos y que indirectamente beneficiará al comercio local, ya que las bases establecen que el gasto debe realizarse prioritariamente en pequeños y medianos establecimientos de la ciudad.

Para poder optar al cheque todos los miembros de la familia tienen que estar empadronados en Vigo con una antigüedad mínima de un año y los ingresos máximos no pueden superar los 645,3 euros mensuales, el salario mínimo. Existe otro límite relacionado con los ingresos al fijarse un tope de 150 euros por persona al mes.

Situaciones dramáticas

Las colas que se ven estos días en el Concello reflejan situaciones de todo tipo, muchas de ellas dramáticas. Jóvenes desempleados, ancianos con familiares a su cargo, matrimonios con hijos y sin percepción salarial alguna... Sus solicitudes deben ser evaluadas por una comisión constituida al efecto en el Concello. El plazo marcado en la convocatoria para resolver las peticiones es de tres meses. Entonces se entregará íntegra la cantidad resultante de dividir toda la partida entre quienes hayan visto aprobada su demanda.

La subvención va destinada a gastos básicos, fundamentalmente para alimentación y la compra de ropa y calzado. El gobierno local tiene en marcha otra convocatoria de ayudas con 200.000 euros para entidades que dan sustento a personas necesitadas (comedores sociales y bancos de alimentos). Por ahora se han presentado dos solicitudes en este área. El plazo termina también esta semana.