Susto este mediodía en las inmediaciones de O Castro. Una mujer alertó a la Policía Local que una niña se encontraba sola dentro del vehículo que estaba estacionado en la calle Atalaya. La menor, que estaba en la silla de retención, se encontraba despierta y sudando dado el calor que había en el turismo. Los agentes se vieron obligados a romper el cristal para extraer a la pequeña. Una vez efectuado el operativo comprobaron que la temperatura dentro del coche era de unos 40 grados.

Alrededor de las 13:15 horas, casi treinta minutos después de que la Policía recibiese la alerta, apareció la madre de la menor, que justificó que había dejado a la niña durmiendo en el vehículo mientras entregaba documentación sobre un curso en Camelias. La mujer quedó con su hija, aunque los agentes remitieron las diligencias a la Fiscalía de Menores por si la madre incurrió en algún tipo de negligencia.