Las limitaciones impuestas desde Madrid en las administraciones están destruyendo empleo público a un mayor ritmo que en el sector privado. Incluso en Vigo, donde el paro azota de forma más cruda por el peso de la industria en su economía, la caída de asalariados del sector público casi duplica a la pérdida de contratos en las empresas, con un 12% frente a un 7%. En A Coruña la diferencia es aún mayor, con una caída del empleo público en el último año del 9,6% frente al 0,5% del sector privado, según datos del IGE. La tendencia se mantiene en Pontevedra y Lugo y la única excepción es Santiago, donde en el último trimestre se experimenta una ligera subida del 5% del personal ligado a algún organismo público. Pasa de 12.100 asalariados a 12.700, aunque, en términos anuales, también retrocede.
