Empezó como un goteo. Pero cada día que pasa el ritmo es mayor. Los magistrados que llevan materia civil en Vigo se reunían esta semana para oficializar su petición de un refuerzo ante el aumento de demandas presentadas por afectados por preferentes y ante la previsión de que la avalancha será mayor: se pronostican miles de pleitos ante la finalización del arbitraje. Por ahora no hubo tal aluvión, pero parece que la vía judicial para recuperar los ahorros atrapados en estos productos está imponiéndose a pasos agigantados. Desde que hace hoy un mes se creó el turno especial en los juzgados vigueses para registrar estos casos y los de subordinadas, hubo 88 demandas. Y casi una treintena de ellas esta última semana: a un ritmo de cinco diarias. - inevitablemente, de forma paralela los abogados ven como los expedientes de esta naturaleza ocupan cada vez más espacio en sus despachos. Algunos letrados ya contabilizan por decenas los asuntos en los que están defendiendo ante los jueces los intereses de los preferentistas.
"Sin duda animo a que acudan al juzgado; es la única manera de recuperar todo el dinero, y en el caso de los juzgados de Vigo además de manera rápida". El abogado Carlos Borrás no tiene duda de que emprender un pleito civil es lo que más garantiza un resultado positivo para los preferentistas. Y es que por ahora, en el pulso judicial entre los bancos y los perjudicados, son los segundos quiénes ganan por goleada. Hace apenas un mes el juez decano Germán Serrano desvelaba que de las 184 sentencias que hasta ese momento se habían dictado en toda Galicia por preferentes y subordinadas, en solo dos se le dio la razón al banco.
Más sentencias
Aunque la judicatura recuerda que lo que se está juzgando son "contratos individuales" y que hay que estudiar "caso por caso -"no quiere decir que todos los afectados tengan la razón siempre y no la tenga el banco", aclaraba aquel día Serrano-, lo cierto es que los fallos judiciales que se continúan conociendo siguen la misma tendencia. El último en Vigo fue notificado esta misma semana y en el mismo el juez condena a Novagalicia Banco (NCG) a devolver a un matrimonio de Forcarei los 30.000 euros que había ahorrado trabajando en la emigración en Andorra. Los argumentos jurídicos siguen la estela del resto de resoluciones que han trascendido hasta la fecha. Existió "un error en el consentimiento": no se informó en ningún momento del "riesgo de iliquidez" ni los clientes tenían el perfil que se requiere para ofrecer estos complejos productos.
El letrado Carlos Borrás representó al matrimonio. A su despacho ya han llegado unos 25 asuntos de preferentes que ha tramitado por vía judicial. "Hoy (por ayer) recibí dos nuevos, uno también de una emigrante", cuenta. Otros juristas también tienen ya a numerosos preferentistas entre sus clientes. "Tengo 11 casos que se encuentran en trámite y mi compañero de despacho otra decena más", relata Tomás Santodomingo. Y el aluvión que esperan los magistrados todavía está por llegar.
