El paisaje urbano de Vigo comparte ADN con el de Sudamérica. Sus fachadas conservan ecos de los edificios de Buenos Aires, Montevideo, Caracas o Santiago de Guayaquil. Sobre ese "hermanamiento arquitectónico" acaba de arrojar luz, con nombres y fechas, el libro Arquitectura e indianos en Vigo e bisbarra. La obra indaga en los lazos que unen ciertas edificaciones olívicas con la emigración gallega retornada de América.

José Ramón Iglesias, su autor, presentó ayer la obra en un acto en el que compartió con lectores, curiosos y eruditos la gran conclusión del ensayo: El "estilo indiano", como tal, jamás existió. "El libro nació al comprobar que se utilizaba mucho ese término, pero lo cierto es que el comportamiento de los indianos fue similar al de la burguesía. La arquitectura funcionaba como señal de prestigio y por esa razón se empleaban en ella los estilos de moda: eclepticismo, historicismo...", revela Iglesias.

Los emigrantes gallegos partían a América. Allí algunos hacían fortuna y -una vez que su posición estaba consolidada- retornaban a Galicia con dinero y algo más: el deseo de construir en sus villas y pueblos edificios semejantes a los que veían en las grandes avenidas de Venezuela, Uruguay o Cuba. Se diluye entonces el mito de un estilo exclusivo indiano y surge una nueva hipótesis: empresarios de éxito que absorbían estéticas ya consolidadas. "Se trata de un patrón europeo que viaja a América y vuelve", explica Iglesias. Su obra aborda el período comprendido entre 1850 y 1950. "Desde el principio del desarrollo urbano de Vigo los indianos dejaron una impronta muy marcada", zanja.

Arquitectura e indianos na cidade de Vigo e bisbarra lo publica el Instituto de Estudios Vigueses (IEV). Ayer, durante su presentación en la Casa del Libro, intervinieron el presidente del IEV, Xoán Carlos Abad, y el también miembro de IEV y prestigioso autor Jaime Garrido. "El libro es fruto en parte del contacto mantenido con él", apunta Iglesias Veiga. Al acto asistió también el concejal de Cultura, Cayetano Rodríguez.