La Comisión Europea (CE) presentó ayer una nueva propuesta legislativa destinada a regular los servicios portuarios con medidas que pretenden aumentar la eficacia y la inversión, y que buscan evitar un nuevo enfrentamiento con los representantes del sector. Fuentes comunitarias aseguran que esta iniciativa estaría dirigida a poner fin al "monopolio" que ejercen en los puertos ciertos colectivos como el de los estibadores, como denunciaron recientemente empresarios viguesas a propósito de la última paralización del Puerto protagonizada por este colectivo.

La propuesta argumentada por el vicepresidente de la CE y responsable de Transportes, Siim Kallas, afectará a 319 puertos "clave" de los cerca de 1.200 que hay en Europa, entre ellos los 38 españoles dirigidos por 28 autoridades portuarias como la de Vigo.

La iniciativa incluye una comunicación y una proposición de un reglamento sobre la prestación de servicios portuarios que busca facilitar el acceso de nuevos competidores, pero mantiene a la vez el sistema actual en que parte de los servicios son considerados públicos. Entre otros, estarían afectados los colectivos encargados de la gestión de residuos, amarre, suministro de combustible o de carga y descarga.