La reestructuración del sector financiero ha forzado el cierre en Vigo de casi 70 sucursales de bancos y cajas. Reducir el número de entidades fue una de las condiciones impuestas para recibir la inyección de fondos públicos para intentar asegurar su viabilidad y esos cambios ya se están notando con la presencia de locales vacíos en el centro del municipio que se ofertan para alquiler o venta. Hay varios ejemplos en Marqués de Valladares, en pleno Colón o en la esquina de Urzáiz con Cervantes. Estos son solo tres de los 68 bajos que las entidades financieras han dejado libres en la ciudad desde diciembre de 2008.

Los últimos datos del Instituto Galego de Estadística (IGE) revelan la pérdida en Vigo de un 21% de las sucursales, en la misma proporción que A Coruña y ligeramente por encima de la media gallega, que registra un 20% menos de oficinas bancarias en los últimos cuatro años. Este último balance tiene fecha del 31 de diciembre de 2012, pero el próximo cómputo de cierres será mucho más abultado porque solo Novagalicia confirmó en febrero que antes de que acabe el primer semestre se formalizaría el cierre de otras 49 oficinas en toda Galicia, 12 de ellas en la provincia de Pontevedra. Y a finales de este año se podrán evaluar por primera vez los efectos de la absorción del Pastor por el Popular y la más reciente compra del Banco Gallego por el Sabadell.

Galicia contaba con 2.535 oficinas bancarias a finales de 2008 y cuatro años después había perdido más de medio millar, en su mayoría en las siete grandes ciudades: Vigo (68 cierres), A Coruña (66), Santiago (20), Ferrol (13), Pontevedra (33), Ourense (22) y Lugo (18). Porcentualmente, donde más sucursales han echado el cierre son Pontevedra y Ourense, con retrocesos importantes del 25 y el 26%, respectivamente.

La reestructuración financiera está afectando especialmente a las regiones españolas que como Galicia han pasado por la fusión de algunas de sus entidades. El número de cierres lo encabeza Cataluña y la comunidad gallega se sitúa en segunda posición con un 20% menos de oficinas desde 2008. Le siguen Madrid, Murcia y la Comunidad Valenciana, donde la red financiera también está sufriendo fuertes retrocesos.

A la espera de que se produzcan los cierres anunciados por NCG, Vigo empezó el año con 249 oficinas bancarias, lo que supone una por cada 1.200 vecinos, una ratio muy superior a la que presentaba hace cuatro años, con una sucursal por cada 970 habitantes. El eje Policarpo Sanz, García Barbón, Colón y Urzáiz se mantiene como corazón financiero de Vigo con más de medio centenar de establecimientos, según el último padrón del IAE correspondiente a 2012.

Hasta hace apenas dos años, cuando aún se hacía distinción, tanto en Vigo como en A Coruña se daba la circunstancia de que prácticamente la mitad de las oficinas abiertas eran de bancos y la otra mitad de cajas de ahorro por la fuerte penetración de Novagalicia en el territorio. En el cómputo global, la ciudad herculina tiene casi tantas oficinas como Vigo -240-, pese a tener 50.000 habitantes menos.

A través de su web inmobiliaria (www.escogecasa.es), Novagalicia Banco tiene ahora mismo en venta nueve antiguas oficinas en la ciudad olívica entre los 96 y los 433 metros cuadrados. La más grande está en la calle Doctor Cadaval, y le siguen las ubicadas en Urzáiz, Torrecedeira, Martínez Garrido, Ramón Nieto, Alcalde Gregorio Espino, Pi y Margall y, la última, es un pequeño bajo en Cánovas del Castillo que lleva ya un par de años cerrado.