El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, eludió ayer implicarse en la defensa del partido judicial de Vigo frente a la propuesta del ministro Alberto Ruiz-Gallardón de eliminar todas las demarcaciones y agruparlas en una única por provincia. Tras el Consello da Xunta, el máximo responsable del Gobierno gallego garantizó que en Vigo "no se va a suprimir ninguna infraestructura ni ningún juzgado", pero tal y como hizo la pasada semana, no se pronunció sobre los planes del Ministerio de Justicia para implantar un modelo judicial con sedes en las capitales, lo que llevaría a la desaparición del partido vigués.En referencia al mapa de infraestructuras, Feijóo subrayó que Vigo debería ser "la primera excepción que se debe hacer en España por motivos objetivos". En cambio, no hizo ninguna mención a la cuestión concreta sobre el partido provincial e insistió fue en el hecho de que la propuesta del ministro es tan solo un borrador.