La precariedad de medios con la que está arrancando no ha sido impedimento para que el juzgado de refuerzo trabaje a pleno rendimiento. Todo lo contrario: dado lo necesario que era este apoyo para descargar de trabajo a los tribunales laborales, el juez y su personal no han tenido tregua y en su primer mes ya celebraron más de un centenar de juicios. "Los medios son los que son, pero se saca el trabajo con toda la dignidad posible, celebrando las mismas vistas orales que cualquier otro juzgado", afirman las fuentes consultadas.

El refuerzo asumirá 110 demandas mensuales (cada uno de los cinco juzgados laborales les remite 22): en un año, excluyendo agosto, resolverán 1.210 causas. Esto supone un alivio para los juzgados sociales, que debido a la crisis trabajan a un ritmo de 1.400 asuntos anuales. "Seguiremos superando el módulo que marca el Consejo General del Poder Judicial, pero ya estamos notando el refuerzo", afirma el juez decano, a la vez titular de un juzgado laboral. Y es que el trabajo en estas salas no para de aumentar. Si entre enero y abril de 2012 registraron 2.291 asuntos, en el mismo período de 2013 ya suman 2.311.