El PP considera indispensable una rebaja de impuestos en Vigo y pone esta condición para apoyar el plan del alcalde para impulsar una amortización de créditos por 16,6 millones con el fin de rebajar la deuda municipal. "Si el PSOE quiere cancelar deuda antes debe explicar por qué se niega a rebajar la carga fiscal a los ciudadanos", destacó el portavoz del grupo municipal, José Manuel Figueroa, que compareció ayer acompañado del edil Miguel Fidalgo. El portavoz de asuntos económicos denunció la contradicción que, a su juicio, supondría esta intención del gobierno vigués de cancelar préstamos concertados en 2011 y 2012 cuando "el Concello acaba de firmar un crédito de nueve millones de euros hace unos días y su plan financiero prevé pedir más de 24 millones hasta el año 2016".

Los populares lamentan que el alcalde "diga unas cosas y luego haga las contrarias", al tiempo que pusieron como ejemplo de lo que debería hacer el Concello el plan de amortización de deuda de la Diputación pontevedresa: "Reducirá la deuda a cero en 2018 pagando 15 millones anuales y sin pedir nuevos préstamos", destacaron desde el PP.

El partido cifró en 75 millones de euros los créditos suscritos por la administración local desde 2008 y que se han tenido que aprobar dos planes económico-financieros "para equilibrar las cuentas que Caballero desequilibró". Figueroa y Fidalgo denunciaron la petición de nuevos préstamos mientras aseguran que las tasas e impuestos municipales han subido un 15% en este mismo periodo. "Los vigueses pagan el agua más cara de Galicia, el transporte más caro y la basura más cara y lo único lógico en estos momentos es rebajar los impuestos si las arcas municipales lo permiten".

El portavoz popular también criticó que Abel Caballero realice anuncios de este calado "sin contar con los votos necesarios", pues le recordó que necesita el apoyo de otros tres ediles para sacar adelante la propuesta en el pleno. "Debe dirigirse al BNG, que son sus socios en la sombra, y esperemos que no abran una nueva polémica", señaló Figueroa, que rechazó los datos de endeudamiento ofrecidos por el gobierno del PSOE y cifró la deuda financiera del Concello en 65 millones, "a los que habría que añadir casi 36 de las liquidaciones negativas pendientes de devolver al Estado".