El Juzgado de Violencia sobre la Mujer volvió ayer a la normalidad con la incorporación de una juez sustituta, aprobada por la Audiencia Provincial tras la petición formulada desde el decanato vigués. La sala, cuya titular está de permiso, tuvo que suspender el martes varias declaraciones a víctimas de maltrato y testigos ya que ese día no contaban con magistrada interina. La juez a la que le correspondía la suplencia, la del juzgado de guardia, no pudo atender todos los procedimientos del de violencia machista debido a la carga de trabajo que tenía en su propio tribunal.
La restricción de los jueces sustitutos debido a una reforma legal ya causó problemas en este mismo juzgado en febrero y también en una sala laboral, donde hubo que suspender juicios ya que su titular estaba enferma.
