La CIG ha solicitado hoy la dimisión del alcalde de Vigo, Abel Caballero, y del concejal de Deportes, Manel Fernández, por el coste al erario público que supondrá la readmisión, obligada por sentencia judicial, de once trabajadores del Instituto Municipal de Deportes (IMD).

La responsable de CIG-Servicios en Vigo, Transi Fernández, ha reseñado que "las gracias" de Caballero le costarán a la ciudad unos 200.000 euros, costas judiciales aparte, y ha añadido que "si el Papa dimitió", en alusión a la renuncia de Benedicto XVI, "también lo puede hacer el alcalde".

Fernández ha hecho este cálculo en base a los salarios de tramitación desde el 27 de octubre de 2012 y a la diferencia entre lo que ingresaron los once operarios en cuestión mientras trabajaron en la empresa privada a la que fueron cedidos de forma ilegal, según sentencia judicial, y los salarios del IMD.

Fernández ha señalado, además, que estos once empleados, que se reincorporarán al IMD el próximo martes en funciones de auxiliares de servicios, se han convertido automáticamente en personal municipal indefinido sin pasar por concurso oposición gracias a la "incapacidad" de Caballero y de su edil de Deportes.

Al alcalde le ha reprochado que cuando los juzgados declararon por primera vez ilegal la cesión de los trabajadores no optase por reintegrar a estos como interinos en el IMD en espera de que hubiera un pronunciamiento sobre el recurso presentado a la sentencia condenatoria.

Con ello, ha explicado la portavoz sindical, el Ayuntamiento de Vigo se habría ahorrado el pago de costas y los salarios de tramitación.

"Si lo solicita la CIG, denlo por hecho"

El alcalde de Vigo, Abel Caballero, se ha tomado a guasa la petición de la CIG de que dimitan tanto él como el concejal de Deportes, Manel Fernández, por el coste de la readmisión, obligada por sentencia judicial, de once trabajadores del Instituto Municipal de Deportes (IMD).

"Si lo solicita la CIG, denlo por hecho", ha comentado entre carcajadas Caballero en declaraciones a los periodistas, a los que ha conminado a que le hagan "preguntas serias".

La responsable de CIG-Servicios en Vigo, Transi Fernández, había reseñado minutos antes que "las gracias" de Caballero le costarán a la ciudad unos 200.000 euros, costas judiciales aparte, y ha añadido que "si el Papa dimitió", en alusión a la renuncia de Benedicto XVI, "también lo puede hacer el alcalde".

Fernández ha hecho este cálculo en base a los salarios de tramitación desde el 27 de octubre de 2012 y a la diferencia entre lo que ingresaron los once operarios en cuestión mientras trabajaron en la empresa privada a la que fueron cedidos de forma ilegal, según sentencia judicial, y los salarios del IMD.

Fernández ha señalado, además, que estos once empleados, que se reincorporarán al IMD el próximo martes en funciones de auxiliares de servicios, se han convertido automáticamente en personal municipal indefinido sin pasar por concurso oposición gracias a la "incapacidad" de Caballero y de su edil de Deportes.