El Juzgado de lo Penal número 2 de Vigo ha impuesto una multa de 1.080 euros para un vecino de la ciudad que se ausentó de su vivienda durante el primero de los ocho días de arresto domiciliario al que había sido condenado. Tal y como considera el fallo judicial, el hombre es considerado autor de un delito de quebrantamiento de condena después de que los agentes de la Policía Local no lo encontrasen en su casa tras ser sentenciado a la pena de ocho días de localización permanente como responsable de faltas de lesiones en grado de tentativa.