El 18 de marzo de 1928 saltaba la noticia. Salía a subasta la sede del Banco de Vigo, en proceso de liquidación.

El inmueble estaba (y está) situado en el número 35 de la calle de Policarpo Sanz esquina Colón y es uno de los más destacados de la zona.

Es la primera gran obra de Gómez Román tras su titulación en Madrid y se sitúa en el abandono de las decoraciones modernistas y antes de sumarse al regionalismo arquitectónico.

En 1918, en las páginas de FARO se informaba que el Banco de Vigo había encargado a Gómez Román el proyecto para su sede principal, que estaría terminado dos años más tarde. La planta baja del inmueble se destinaba a oficinas bancarias y el resto, a viviendas.

Del edificio destaca, además del conjunto, su cúpula y las cinco grandes esculturas que representan a los cinco continentes, un símbolo de las relaciones comerciales de la ciudad y del propio banco con todo el mundo.

Anuncio de subasta

En el anuncio de subasta se señala que se trata de una edificación compuesta de sótano, planta baja y cuatro pisos, cuyo solar mide unos 596 metros cuadrados de superficie.

Linda al sur o frente con dicha calle de Policarpo Sanz; al norte o espalda, con bienes de doña María Victoria Pardo García, doña Ángeles Courel Pardo y otros herederos de don Eudoro Pardo Labarta y, en parte, con bienes de los herederos de José Barreras y Casellas; al este o derecha entrando con la calle de Colón; y al oeste o izquierda, bienes de los herederos de José Barreras y don Francisco Solleiro.

La finca fue adquirida por escritura de compra otorgada el 5 de abril de 1918 ante el notario don Casimiro Velo de La Viña y en los registros aparecía inscrita a nombre de la Comisión Gestora de la Liquidación del Banco de Vigo al folio 45, tomo 123, finca 7.685 inscripción primera del Registro de la Propiedad de este partido.

Por acuerdo de la Comisión Gestora de la Liquidación del Banco de Vigo y en cumplimiento del artículo 13 para la ejecución del Convenio judicial, se anunciaba su venta en pública subasta, para la que, entre otras, regirían las siguientes condiciones:

La subasta quedó fijada para el 8 de Abril de 1928, a la hora de las doce de la mañana y en el local que ocupaba la Caja de Ahorros y Monte de Piedad Municipal de Vigo en el mismo edificio.

El tipo de subasta se fijó en un millón setecientas setenta y nueve mil pesetas con treinta y siete céntimos.

Desde dicho tipo arrancarían las pujas a la llana por elevaciones mínimas de cien pesetas hasta el remate.

Los optantes a la subasta tuvieron que constituir previamente en la Caja de Ahorros y Monte de Piedad Municipal de Vigo un depósito equivalente al dos por ciento del tipo señalado en la condición segunda. Y para concurrir a la subasta era imprescindible la presentación en el momento de celebrarla del resguardo acreditativo de haberse cumplido tal requisito.

Los que no fueran rematantes deberían retirar dicho depósito con el acta en que consta que no les fue adjudicada la finca.

En el anuncio se señala también que de las demás condiciones y titulación se ofrecería información en la notaría de don Casimiro Velo de la Viña, calle de Policarpo Sanz, Vigo.

Celebrada la subasta, el inmueble pasó a ser propiedad del Banco Pastor que desde ese año mantiene en él su oficina principal de Vigo.

Durante años acogió también las instalaciones en Vigo de la Alianza Francesa y en uno de sus pisos tuvo su consulta el doctor Cesáreo Corbal, lo que recuerda una placa situada en uno de los laterales del portal.