Los cuatro grupos con representación en el Parlamento gallego sumaron ayer sus votos para pedir a la Xunta y el Gobierno central que reclamen ante las instancias comunitarias que el puerto de Vigo sea incluido como "nodal" en la Red Transeuropea de Transportes.

La iniciativa fue defendida por el diputado vigués del PP Javier Guerra, quien responsabilizó de la "exclusión" al exministro de Fomento José Blanco. Guerra justificó su petición de que el puerto tenga la consideración de "nodal" en que se trata del primero del mundo en tráfico de pesca para el consumo humano, líder en España en movimiento de granito y el segundo en tráfico 'ro-ro' de vehículos nuevos. Ante estos datos, criticó con más dureza que el anterior Gobierno "no defendiese" su inclusión. "Hay que intentarlo ahora", remarcó, para apelar a la "unión" de todas las fuerzas parlamentarias.

La diputada del BNG Carme Adán arremetió contra la "hipocresía" del PP por traer esta petición después de que su grupo en la Eurocámara se opusiese a la inclusión de Vigo en la red. Tras recordar que fue el Bloque en el Parlamento europeo el que incorporó el puerto vigués en las enmiendas y que "PP y PSOE votaron en contra", concluyó que los populares tratan de "lavarse la cara" cuando ya "casi" no existen "oportunidades" para que el puerto sea incluido en la red.

Manel Gallego (PSOE) admitió que su partido "se equivocó" en la votación en la Eurocámara, al igual que el PP, pero se comprometió a que los diputados socialistas en Bruselas "apoyarán" todas las medidas para que se incluya a Vigo. A renglón seguido, cuestionó el interés de Guerra por defender a la ciudad y le preguntó por qué el presidente de la Xunta no llevó este asunto a la reunión del lunes con Mariano Rajoy.

Por su parte, el diputado de AGE Antón Sánchez se mostró partidario de apoyar al puerto de Vigo y rechazó hacer "un ajuste de cuentas". Defendió que el Gobierno central se implique, algo que fue aceptado por Guerra.