El Consorcio de la Zona Franca aprueba un plan de eficiencia energética con especial incidencia en el polígono de Balaídos. El organismo invertirá ocho millones de euros en tres años para sustituir las lámparas fluorescentes del parque por tecnología led más barata, instalará paneles fotovoltaicos aprovechando la buena orientación de las cubiertas de las naves y elevará la tensión de suministro a PSA y GKN Driveline para que la electricidad les salga más barata. Subir de media a alta tensión la conexión de la factoría de automóviles implica la construcción de una nueva línea de 220 kV hasta Vigo y depende de la autorización de Red Eléctrica, pero el cambio de baja a media para GKN es ya viable y supondrá un ahorro del 18,6% en la factura eléctrica de la firma.

"Hasta ahora nos habíamos centrado en construir polígonos y movilizar suelo industrial, pero en este momento la demanda está cubierta y decidimos reorientar nuestros esfuerzos a mejorar la competitividad de las firmas instaladas en nuestros parques", resume la delegada del Estado en Zona Franca, Teresa Pedrosa. Tras su llegada hace un año se impulsaron auditorías energéticas en cada uno de los operadores para determinar los cambios más rentables.

El plan de mejora energética abarca tanto los parques como las instalaciones propias de Zona Franca y este mismo jueves publicaba en su web la licitación por 120.000 euros del primer lote de tubos led para iluminar las oficinas de Bouzas, los aparcamientos de La Estrella y A Laxe y el centro de servicios del polígono de A Granxa. Esta mejora se aplicará también en Balaídos hasta completar la sustitución de 80.000 puntos de luz con una inversión prevista de más de 2,2 millones de euros. El Consorcio prevé ahorrar con esta primera medida un 55% de su factura de la luz que se traduce en 925.000 euros anuales.

Otra de las grandes intervenciones que realizará Zona Franca en Balaídos con repercusión directa en las cuentas de la decena de empresas allí instaladas es la generación de energía fotovoltaica colocando paneles en todas las cubiertas. Invertirá 2,7 millones en 11.500 módulos de silicio cristalino de 300 Wp y seis transformadores que le permitirán reducir un 4,5% la demanda de energía del polígono que equivale a casi medio millón de euros.

El objetivo es rebajar los costes de producción de las empresas instaladas en Balaídos y consolidar los empleos. Las actividades que allí operan tienen un consumo eléctrico muy intensivo hasta el punto de que Balaídos es el quinto o sexto centro de producción con mayor demanda de energía de Galicia. Zona Franca espera amortizar estas inversiones en el plazo de dos años y con ello "disminuir los costes y necesidades de financiación de las empresas, mejorar su imagen, descongestionar la red eléctrica nacional -evitar apagones en la zona- y posicionarse como institución comprometida con la innovación". Esta medida se suma a la anunciada la semana pasada de ofrecer bonificaciones en los alquileres a PSA y GKN Driveline, las únicas que pagan un canon por producción además de la cuota fija por superficie.

Los planes de eficiencia comienzan por Balaídos porque es un polígono con 56 años de antigüedad cuyas redes se han quedado obsoletas frente al empleo de energías verdes en nuevos parques como el de Porto do Molle. La última mejora energética prevista es la conexión de PSA a la red de distribución de en alta tensión en lugar de en media, lo que le permitiría un ahorro estimado en la factura del 7,75%, según datos del Consorcio, que está en negociaciones con Red Eléctrica puesto que esta mejora requiere una nueva línea a 220 kV desde Atios hasta Balaídos y no estaba prevista inicialmente en el plan de expansión de la compañía 2012-2016. "Confiamos en que finalmente salga adelante", avanzan desde Zona Franca, que tendría entonces que realizar una nueva subestación. Considera el proyecto "económicamente viable", pero no está presupuestado hasta que tengan permiso.

El cambio que sí pueden afrontar a corto plazo es la conexión de GKN, el mayor proveedor de componentes de automoción de Galicia, a la red de 132 kV -ahora está en 15- aprovechando la nueva subestación soterrada que Unión Fenosa construirá en Balaídos. La reducción se calcula en un 18,6% del coste total de energía de la factoría y la inversión que tendrá que realizar Zona Franca ronda los tres millones de euros.

El organismo prevé ejecutar este año las mejoras en iluminación para ahorrar un 55% en la factura de la luz de sus instalaciones e ir avanzando en la redacción de los proyectos de generación fotovoltaica y la obtención de permisos, abordando en 2014 la puesta en marcha de los paneles solares y la redacción del proyecto para GKN. Para 2015 quedaría la construcción del centro de transformación para proporcionarle energía en media tensión. La inversión completa en tres años ronda los 8 millones de euros y Pedrosa confía en extender las mejoras "al resto de parques de forma progresiva".