Los estudiantes dejaron ayer las aulas para salir a protestar en la calle en el segundo de los tres días de huelga. Universitarios y alumnos de enseñanza secundaria se manifestaron en Vigo y en las principales ciudades gallegas y de todo el país para exigir la retirada del proyecto de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) y pedir la dimisión del ministro de Educación, José Ignacio Wert. A la convocatoria en todo el Estado del Sindicato de Estudiantes se sumaron en la jornada de ayer los Comités, la Liga Estudiantil y la Asemblea de Estudantes de Vigo (AEV), dando lugar a una de las manifestaciones de alumnos más numerosas que se recuerdan en la urbe, con casi 3.000 personas. Las protestas regresarán a la calle esta noche (20.00 horas desde Vía Norte) en otra manifestación convocada por el Sindicato de Estudiantes y la Federación Olívica de Nais e Pais de Alumnos (Foanpas).

Bajo el lema "Non a LOMCE! Por un ensino público e galego de calidade!" los jóvenes salieron pasadas las 12.00 horas de Praza de América para recorrer Gran Vía, Urzaiz, Colón, Policarpo Sanz y finalizar a las 13.30 en Porta do Sol, donde cada una de las cinco organizaciones convocantes leyó su manifiesto. La lluvia hizo varias veces acto de presencia en un recorrido que transcurrió sin incidentes y con cánticos contra Wert o consignas como "O ensino non se vende, se defende". Pese a todo, la anécdota la protagonizó un vecino que en el transcurso de la manifestación mostró la bandera de España desde su ventana, una acción que fue recibida con lanzamiento de huevos a la fachada del edificio. El punto y final a la marcha lo puso el cántico del himno gallego.

Encierro

El ambiente previo a la protesta comenzó el día anterior en la facultad de Minas, donde la Asemblea Universitaria de Vigo realizó un cierre simbólico para mostrar su total desacuerdo con la LOMCE. La veintena de estudiantes aprovechó la noche para hacer pancartas explicativas, al tiempo que se organizaron debates y charlas sobre el tema.

"Esta es una de las manifestaciones más numerosas y eso sucede porque las medidas del ministro Wert no concuerdan con las ideas de la gente. Él plantea un modelo excluyente, recupera las reválidas e insiste en españolizar relegando al gallego e imponiendo la asignatura de religión", recriminó Brais Fortes, responsable de los Comités Abertos en Vigo. Alberte Mera, secretario xeral de Galiza Nova, se expresó en la misma línea. "El espíritu de esta ley de la vergüenza es privatizar la enseñanza, degradar el sistema público y reducir las posibilidades de los estudiantes con reválidas que son como la selectividad. Implica más recortes y despidos, por lo que los alumnos con más dificultades se verán abocados a estar en aulas masificadas sin recibir la atención especial que necesitan. Además, aumentan las tasas y disminuyen las becas, por lo que a la universidad solo podrán acceder los hijos de las élites", garantizó. Al mismo tiempo, criticó el peso que asumiría la asignatura de religión frente a la lengua y literatura gallega. Alberto López, de AUV, añadió a estos mismos argumentos que la LOMCE "resta democracia interna en el seno de los centros educativos y prima la competitividad en lugar de la formación". En el caso de Galicia, López recalca que el nuevo marco normativo supone "el mayor ataque sufrido por la lengua gallega desde el franquismo".

También en A Coruña y Ferrol los estudiantes recorrieron las calles más céntricas. En esta última ciudad Néstor Fernández, de la organización juvenil Galiza Nova, aseguró que "se hacía necesario una nueva huelga".