Los buzones de Papa Noel y los Reyes Magos ya están preparados para recibir los deseos de la gente y los comercios estrujan sus mentes para que sus productos encuentren un hueco en unas cartas que este año se prevén mucho más cortas. El puente de la Constitución, tradicional pistoletazo de salida para las compras navideñas, ha llenado las calles comerciales de potenciales clientes que escrutan el mercado y hacen sus cuentas, pero que todavía se muestran reacios a abrir sus carteras. Los empresarios no se desaniman, convencidos de que el consumo es inherente a estas fiestas, y esperan que se dispare a patir del próximo fin de semana. Ante una campaña navideña que se presenta concentrada (apenas una semana antes de Navidad), el sector prepara sus estrategias de descuentos y actividades para atraer a la clientela en sus "compras exprés".

La población viguesa ha abandonado este año la costumbre de anticipar las compras. En los comercios no perciben las prisas de otros años por hacerse con los regalos antes de que los productos se agoten y, en los mercados de abastos, ni particulares ni hosteleros han hecho acopio de materia prima para servir a la mesa en las fechas más señaladas. En el mercado del Berbés calculan la caída de las ventas en un 30% con respecto al año pasado.

"La gente está en plan de ver", analiza el gerente de Centro Príncipe, Enrique Núñez. El del Centro Comercial Gran Vía, Fernando Pinto, comparte su visión y vaticina que el consumo comenzará a partir del día 15. A pesar de que han descartado obtener los beneficios de otros años, el sector es optimista y está convencido de que las fiestas animarán el consumo. "La gente algo va a comprar, seguro", opina Encarna Álvarez, presidenta de la asociación de Traviesas y Anxo Méndez, del Casco Vello, cree que "aunque no levante el trimestre, ayudará para sostener los gastos".

Para el comercio, ayer no fue un día festivo. Gran parte de los establecimientos del centro de la ciudad celebraron la Inmaculada Concepción con la verja subida, tal y como les permite el calendario de la Dirección General de Comercio. Otros -en especial, el pequeño comercio más alejado del centro- han preferido hacer puente. "Las posibles ventas tampoco nos compensan tanto y, a veces, no hacemos vacaciones en todo el año, así que esperamos a los puentes para poder descansar", explica la representante del comercio en Traviesas, donde la actividad ayer fue reducida. Es hoy el día en el que, obligados a cerrar, reunirán fuerzas en sus casas para el maratoniano mes de trabajo que les espera. "A partir de ahora son treinta días que no descansas", destaca el gerente de Zona Príncipe, Enrique Núñez. Su actividad de estímulo del consumo más cercana es la Feria de Dulces de Convento (del 11 al 16), en la que se podrán adquirir delicias de 30 monasterios de clausura. En Zona Centro vuelven a apostar este año por una iniciativa que les dio muy buenos resultados la pasada Navidad: la Noche Blanca. El jueves 20 los establecimientos permanecerán abiertos por lo menos hasta media noche mientras grupos corales amenizarán con sus villancicos las calles y artesanos desvelan los secretos de sus oficios en talleres.

Además de las actividades que organizan las distintas asociaciones, los comercios se lanzan este año a la caza del cliente con ofertas y promociones que, en algunos casos, llegan al 50% de descuento del precio del producto. Eso sí, nadie se ha atrevido todavía a colgar el cartel de "Rebajas".