El bus eléctrico se resiste a recorrer las calles del Casco Vello. Solo media hora después de entrar en funcionamiento y tras varias semanas fuera de servicio por una avería, el microbús modelo Zeus volvió a estropearse ayer por un fallo en la batería. El vehículo encadena así tres averías consecutivas que le obligan a interrumpir su servicio y llevan al Concello a exigir a Clem €la empresa adjudicataria€ que "llegue a las últimas consecuencias" en esclarecer el problema. "No es tolerable", zanja el edil de Movilidad, Carlos López Font.

El Gobierno local no descarta incluso solicitar una indemnización o que se sustituya el modelo problemático. "Debe asumir sus responsabilidades como suministradora del vehículo y abrir una investigación", anota Font, quien recuerda que el jueves un técnico de la escudería llegado desde Valencia certificó el buen estado del microbús. En las dos ocasiones anteriores la unidad Zeus registró "fallos en cadena" que hubo que solventar. "Nos dijeron que podía funcionar sin problemas", anota el titular de Movilidad, Transporte y Seguridad.

Font recuerda así mismo que elbus eléctrico €propiedad del Concello y operado por la concesionaria de transporte urbano Vitrasa€ permanece todavía en período de garantía, con lo que todos los costes de las reparaciones corren por cuenta de la empresa. Sobre el plazo para que el microbús vuelva a recorrer las calles de la zona histórica, Font se muestra prudente. "No somos capaces de concretar una fecha; de momento hemos acudido a la empresa para celebrar una reunión sobre el tema", corroboran desde Movilidad. Hasta que dejó de operar a principios de mes el bus daba servicio a cerca de 25 usuarios diarios en un recorrido de 6,5 kilómetros.