La fuerte tormenta veraniega que anegó la ciudad a finales de agosto le costará 4 millones de euros al Consorcio de Compensación de Seguros, que hasta esta semana ya había abonado la mitad de esa cuantía a 500 de las 983 solicitudes recibidas desde Vigo y concellos próximos como Baiona o Porriño. A partir del lunes, se pagarán otras 85. La delegación gallega, con sede en A Coruña, estima que las indemnizaciones por las fuertes lluvias caídas el 23 y el 26 de octubre, supondrán la misma cantidad.

Hasta el momento, las reclamaciones por daños producidos durante ambas fechas en bajos de viviendas, locales y vehículos superan las 300 y la previsión del Consercio es llegar a las 800.

"Tanto en agosto como en octubre la inmensa mayoría de solicitudes de la provincia de Pontevedra llegaron desde Vigo y zonas próximas. Ahora mismo, los peritos ya tienen asignadas casi todas y en algunos casos ya se han puesto en contacto con los afectados o lo harán en próximos días. Y los primeros pagos podrían realizarse la semana que viene", anuncia Antonio González, director de la delegación del Consorcio en Galicia.

Muchos de los damnificados por las lluvias de las últimas semanas ya lo fueron en agosto, aunque la entidad ha tenido constancia de "nuevas zonas" de siniestralidad durante las tormentas de octubre. El resto, añade González, son "clientes conocidos" de áreas como Beiramar, Areal o Colón.

Aún así, el responsable del Consorcio asegura que las cifras de declaraciones de daños de los últimos meses "no ocurren todos los años" y las compara con las registradas en octubre de 2006 cuando las lluvias y rachas de viento de hasta 140 kilómetros por hora hicieron estragos en Vigo y en otras localidades como Baiona, donde se anegó la parroquia de Sabarís tras el desbordamiento del río Groba.

La mayoría de solicitudes de indemnización proceden de locales comerciales y bajos de inmuebles anegados, así como de vehículos afectados por las trombas de agua. La de agosto originó más de 250 reclamaciones de propietarios de automóviles y los temporales de octubre dejan hasta el momento "entre 60 y 70".

El Consorcio trabaja con previsiones basadas en la experiencia y las estadísticas de episodios anteriores. En agosto, sin embargo, sus cálculos se quedaron cortos en cuanto al número de peticiones, pues estimaban unas 800. A día de hoy y, aunque todos los expedientes están "prácticament liquidados", todavía se siguen recibiendo peticiones y algunos peritos se encontraban comprobando los daños de la primera tormenta cuando se produjeron las inundaciones de octubre. "Una vez que se nos comunica la incidencia, los casos se resuelven rápido. En verano, los primeros pagos se ralizaron a la semana siguiente", destaca González.