La permanencia de Ryanair en Lavacolla a base de ayudas autonómicas tiene como principal víctima a Peinador. La Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) está tan convencida de que la terminal viguesa es la "gran perjudicada" por la ofensiva subvencionada de la aerolínea irlandesa desde Santiago que su presidente, José Manuel Fernández Alvariño, reclamó ayer "que se acaben por el bien de Peinador y porque llevan muchos años recibiendo dinero, y ya está bien".

En concreto, la compañía de bajo coste cumplirá en 2013 nueve años consecutivos subvencionada por el gobierno autonómico. Como publicó ayer FARO, la Xunta de Fraga selló el primer acuerdo para iniciar las operaciones en 2005, el bipartito de PSOE y BNG lo renovó y este año el Ejecutivo de Feijóo firmó con Ryanair un convenio para seguir en Lavacolla hasta 2013. Con estos repetidos acuerdos envueltos bajo la nomenclatura de "patrocinios de publicidad", como insiste en llamarle la Xunta, la aerolínea se ha embolsado desde su desembarco en Lavacolla cerca de cinco millones de euros.

"Tener tres aeropuertos es una ventaja si se coordinan. La Xunta es la que gobierna ahora y debe tener mucho cuidado con fomentar un desequilibrio, y esto es lo que se consigue con el convenio con Ryanair y por eso debe retirarse", afirma el portavoz de los empresarios.

La interpretación que hace Alvariño de la estrategia de Ryanair coincide con la advertida de forma reiterada por los expertos aeroportuarios. Que Ryanair aprovecha la concesión de ayudas para abrir rutas internacionales en Santiago para operar en paralelo conexiones nacionales explotadas por los otros dos aeropuertos. "Y esto atenta gravemente a la competitividad de Peinador", argumenta el presidente de los empresarios de Pontevedra.

Así se entiende que Peinador perdiese en el primer semestre de este año 143.277 pasajeros en los enlaces a Madrid frente a los 98.000 que ganó en el mismo periodo Lavacolla. Y no hay pócimas mágicas. Detrás de ese inusitado aumento de usuarios en la línea Santiago-Madrid está la polémica low cost, que explota esta ruta desde finales de 2008. "Yo defiendo Peinador, pero en estos momentos, Ryanair representa un enorme perjuicio para Galicia, porque además también afecta a Alvedro", argumenta el portavoz de la patronal.

Al tiempo que Fernández Alvariño insiste en que convenios como los firmados con Ryanair "tienen que acabarse", exige a la Xunta que "no vuelvan a repetirse en el futuro". Aboga, como sostiene el estudio encargado al experto Rubén López, por una negociación con las aerolíneas basada en dos cláusulas de obligado cumplimiento: financiación condicionada a un porcentaje de ocupación del vuelo y compromiso de permanencia en la ruta por parte de la aerolínea.

Como el resto de acuerdos suscritos en Galicia entre las distintas aerolíneas con instituciones como los Concellos, el acuerdo sellado entre el gobierno gallego y Ryanair simplemente indica las rutas que se compromete a operar en Lavacolla –Londres, Milán y Fráncfort– y el dinero que percibirá por ello. En este sentido, desde la Xunta sólo revelan los 500.000 euros que recibirá la compañía irlandesa este año, sin especificar si se mantendrá la misma cuantía en 2012 y 2013. "No es una cantidad fija", matizan fuentes autonómicas, aunque ya admiten que se incluirá en el Presupuesto autonómico. Respecto a las subvenciones para el resto de aeropuertos, todavía no están garantizadas.