El Concello apremia a la Dirección Xeral de Patrimonio a autorizar el derribo del Barrio do Cura, y la Consellería de Cultura replica que está en manos de la Concejalía de Urbanismo la resolución del proceso. Portavoces del departamento autonómico defendieron ayer que la dirección xeral está cumpliendo "en tiempo y forma" los plazos para emitir el informe sobre el proyecto de demolición, y se hallan a la espera de que el Concello "remita los documentos solicitados en agosto sobre el estado y el valor histórico de las viviendas" a derribar.

El proyecto afecta en una primera fase a 22 inmuebles, entre ellos el antiguo asilo de la calle Pi y Margall, del que se conservará la fachada (desmontándola y trasladándola a otro emplazamiento) por su valor patrimonial. Fuentes oficiales de la consellería señalan que Patrimonio emitirá el informe, pero "una vez recibida dicha documentación". A mayores, Cultura envía un mensaje al Concello sobre la parte esencial que le toca tramitar para hacer posible la operación del Barrio do Cura. "Le recordamos la importancia de que finalice el Plan Especial pendiente desde 2008", indican sus portavoces.

Críticas del PP

Por otra parte, el PP, a través de la concejala Elvira Larriba, aseguró ayer que "el único culpable del retraso en el Barrio do Cura es el alcalde de Vigo", y criticó que Caballero "pretende tapar su falta de gestión acusando a la Xunta de Galicia".

Larriba recuerda que el Plan Xeral se aprobó en 2008 y "fue el alcalde el que decidió desligar el ámbito del Barrio do Cura del Plan Especial del Casco Vello". Es pues, indica la concejala, "responsabilidad suya la planificación de ese área y la aprobación por el pleno".

Los populares indican que desde abril, cuando Urbanismo envía el proyecto de la primera fase de demolición a Santiago, "la Xunta le ha requerido reiteradamente documentación al Concello para elaborar un nuevo informe". La última petición data del 3 de agosto, por lo que "Patrimonio estaría actuando dentro del plazo legal de tres meses", expone Larriba. Los populares achacan el retraso en la operación del Barrio do Cura al "desinterés y la lentitud de Abel Caballero durante el mandato anterior, porque esa zona pertenecía a un área de sus socios de gobierno".

"El Casco Vello era el buque insignia del BNG. Lo demuestra el hecho de que hasta 2010 el alcalde no desveló los detalles de la intervención en el Barrio do Cura, en el que ya estaba prevista la sustitución del túnel por un vial en superficie. Carmela Silva –la concejala de Urbanismo– busca ganar tiempo y crear una nueva confrontación", apostilla la concejala del PP.