Se cumplen 125 años de la inauguración y entrega oficial de la Casa-Asilo a las Hermanitas de los Ancianos Desamparados. El acto se verificó el seis de agosto de 1886 "con gran solemnidad", según las cónicas de la época.

Tres años antes había llegado a Vigo para establecerse, la superiora general de esa congregación, Sor Teresa de Jesús, acompañada de su secretaria y tres religiosas, instalándose en el número 186 de la calle del Arenal.

Poco después, "el párroco castrense de esta plaza, Don Juan Manuel Pérez Martínez, les donó el terreno situado en el principio de Pi y Margall para levantar el asilo", obra que se desarrollo en varias fases "y entre grandes penurias económicas".

El acto

Después de bendecir la imagen tutelar del Asilo en la Colegiata el presbítero D. Casimiro Vázquez, "tuvo lugar una función religiosa, dirigiendo a los fieles su palabra desde la Cátedra del Espíritu Santo el Sr. Pérez de la Riva. En seguida fue conducida la imagen al asilo procesionalmente, acompañada de la banda de música del regimiento de Covadonga, que se prestó desinteresadamente a ello".

A eso de las diez comenzó la sesión con la lectura de un oficio del Obispo de la Diócesis, que había delegado en el Sr. Prior de la Colegiata. En seguida el presidente de la Junta gestora, Sr. López de Neira, pronunció algunas frases alusivas al acto.

El secretario D. Marcelino Ferrer leyó "una extensa memoria, en la que después de demostrar las ventajas que reportan á la humanidad estas Instituciones y de dar gracias á cuantos contribuyeron con sus donativos á la instalación, dio cuenta detallada de las obras de la Casa-Asilo y leyó un estado de las cuentas generales".

Terminada la sesión, "la orquesta que dirige el señor Piñeiro tocó muy bonitos números, y después se sirvió una abundante y variada comida á los asilados, para la que aportó 50 pesetas la Excma. Corporación municipal". Al acto asistieron numerosos fieles.

Tendrían que pasar casi quince años para que tuviera lugar la inauguración de "la nueva y magnífica iglesia de las Hermanitas de los Pobres".

Al acto se celebró en julio de 1910 con asistencia del obispo de la diócesis y una comisión del Ayuntamiento, compuesta de los Sres. Sanjurjo, Lorenzo y Pita y muchos invitados",

Durante todo el día "el templo fue visitadísimo. y por la tarde pronunció un elocuente sermón el obispo Sr. Menéndez Conde".

Las obras de la capilla, que según noticias habían costado "20.000 duros de los que están aún en descubierto 7.000", se llevaron a cabo con el importante donativo de una persona piadosa. El local que antes era capilla se destinó a enfermería.