La auditoría realizada por la Xunta reconoce nueve deficiencias "graves" a resolver por la empresa concesionaria de la estación de autobuses. Se resumen en los siguientes apartados:

1. Aparcamiento. "Estado precario de las barandillas perimetrales del aparcamiento, así como del muro de contención".

2. Escaleras mecánicas. "Las escaleras mecánicas de bajada a la dársena y uno de los ascensores están inoperativos".

3. Conducciones interiores. "Conducciones interiores de zinc oxidadas que presentan filtraciones, dando lugar a problemas eléctricos, eflorescencias en pilares y deterioros en la estructura metálica".

4. Aspecto de abandono. "Cierto aspecto de abandono, motivado por la falta de limpieza de cristaleras, pintadas, locales vacíos y vandalismo".

5. Tacos de frenado. "Ausencia de tacos de frenado en cada uno de los espacios reservados para el estacionamiento de autobuses en la dársena".

6. Robos y prostitución. "Suelen ocurrir robos y problemas relacionados con la prostitución, pese a la que la zona se encuentra vídeo vigilada".

7. Señalización. "Tanto la señalización interior del edificio como la señalización por carretera se consideran deficientes".

8. Iluminación y olor. "Escasa iluminación y olor desagradable en la zona de andenes. Asientos de plástico en las dársenas muy deteriorados".

9. Puertas automáticas. "Las puertas automáticas en los puntos de acceso se encuentran fuera de servicio".