La Xunta planea suprimir las aulas de ESO y Bachillerato del IES Manuel Antonio, donde actualmente estudian unos 200 alumnos en estas etapas educativas. Así lo aseguran portavoces de la asociación de padres del centro, que el martes se reunieron en Santiago con el director xeral de Educación, Formación Profesional e Innovación Educativa, José Luis Mira Lema, para aclarar el "rumor" que desde hacía tiempo se escuchaba en los pasillos del instituto sobre la eliminación de Secundaria y Bachillerato en el centro. Y confirmaron sus sospechas. "Después de hablar con la concejala Laura López Atrio, con el inspector y el jefe territorial de Educación, que ninguno sabía nada de esto, mantuvimos una entrevista con Mira Lema y nos trasladó la intención de la consellería de suprimir ESO y Bachillerato ya el próximo curso y que estaban viendo la manera de llevarlo a cabo", aseguran desde la Anpa, que ayer por la tarde celebró una asamblea para abordar este asunto que trae de cabeza a la comunidad escolar del Manuel Antonio.

"Quedan veinte días para finalizar el curso (el 23 de junio), los chavales están en exámenes, y no sabemos dónde van a estudiar el próximo curso. Lema nos dijo que irán todos al mismo centro, y los profesores también", comentan los padres, quienes alertan del "nerviosismo" y de la "situación de incertidumbre" en el centro, el único de la ciudad en el que la consellería eliminará las clases de Educación Secundaria y Bachillerato para aumentar la oferta de Formación Profesional y convertir el Manuel Antonio es un Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP), siempre según la versión de la Anpa. "Hay otros institutos que imparten las tres etapas educativas, como el de Teis, el Politécnica o el Ricardo Mella", recuerdan.

Por el momento, los padres esperan a una confirmación oficial y por escrito para emprender algún tipo de actuación que, al menos, le permita a sus hijos gozar del derecho de elegir el centro en el que quieren estudiar el próximo curso. "Los plazos de inscripción ya están cerrados; rechazamos por completo esta forma de actuar", critican los progenitores. El sindicato CIG también censuró ayer "el procedimiento de la Administración" en este sentido, tachándolo de "actitud antidemocrática y autoritaria".