"Pensé que en época de crisis los partidos actuarían con responsabilidad... pero no ha sido así". Tras dos semanas lidiando con los grupos mayoritarios para que su discurso llegase a la calle, el candidato de Esquerda Unida (EU), Rubén Pérez, tacha el esfuerzo de "titánico" y "numantino". Sabe que su presupuesto es muy inferior al de socialistas y populares –promete hacer públicas sus cuentas tras el 22-M– pero se muestra convencido de que "en algunos puntos hemos conseguido marcar el debate electoral". Ayer EU cerró la campaña con un acto en Praza da Princesa al que acudió, entre otros, el ex concejal del Partido Comunista de Galicia (PCG) y número siete de su lista, Carlos Núñez.

Aunque las estadísticas les mantienen fuera de la corporación municipal, Pérez afirma que "las expectativas son muy buenas". "EU no es un partido minoritario, sino minorizado. Llevamos 25 años como fuerza política y este año nuestras opciones son mejores que nunca", apunta quien aspira a "aumentar la democracia participativa en el Concello". A la pregunta de si se ve pactando con algún grupo tras alcanzar ese resultado la respuesta del candidato es clara: "queremos desalojar al PP del Concello, pero tampoco nos vemos pactando con un PSOE y un BNG que muestran su mismo posicionamiento político".

A la espera de que las urnas se pronuncien mañana Pérez considera ya una victoria el "haber puesto el debate de la remunicipalización de los servicios públicos sobre la mesa". La propuesta –incluida también en el programa del BNG– consiste en devolver a manos del sector público servicios como el alumbrado de las calles, la distribución de agua o el transporte público. "EU ya aplica esa medida donde gobierna y sabemos que es posible" –explica Pérez– "el Concello puede así incrementar las plantillas y generar empleo en la ciudad".