Las "amenazas" bajo las que dicen vivir en su día a día y el miedo a que la situación se agrave llevó ayer a una veintena de vecinos de la calle Eduardo Chao a comparecer ante los medios para solicitar una solución al "continuo vandalismo, indigencia, amenazas, tráfico de estupefacientes y robos" que padecen en su barrio. El temor a posibles represalias les llevó a hacerlo además con el rostro cubierto y protegidos por una patrulla de la Policía Nacional.
Desde ayer ellos y otros 80 comerciantes y vecinos de Eduardo Chao que integran la Plataforma de afectados realizarán actuaciones por toda la ciudad para "erradicar" los problemas que detectan. "Queremos pasear o caminar por la calle sin miedo. Solo pedimos una situación de normalidad para habitar aquí y encargarnos de nuestros negocios", explica la portavoz de la plataforma, Zoila Fernández. La situación, que según los vecinos se prolonga desde hace más de un año, está volviendo "completamente ruinosos" los establecimientos de la zona.
"Los 30 o 40 responsables de esta situación lo manchan todo, beben en la calle, gritan, amenazan... y lo peor es que cuando llamas a la Policía los agentes están atados de manos, no pueden hacer nada", lamenta Fernández. Prueba de esa realidad es que en el último año los vecinos de Eduardo Chao interpusieron cerca de 300 denuncias. "Pero no sirve de nada," –apunta la portavoz– "pierdes varios días asistiendo a la comisaría y a los juzgados para que al final les impongan una sanción administrativa que no pueden pagar por insolventes".
En marzo de 2010 los vecinos de Eduardo Chao y las calles adyacentes hicieron público su problema al entregar en el Registro del Concello más de 500 firmas para que la Concejalía de Seguridad aplicase la prohibición del botellón en su vial. "Ha pasado más de un año y el Concello de Vigo sigue sin hacer nada al respecto", denuncia Fernández, quien asegura que en la calle se bebe "todo el día de lunes a domingo".
Además de renovar su solicitud para que Seguridad aplique la "ley antibotellón" en Eduardo Chao, la Plataforma exige al Concello que controle la venta de alcohol a menores en la calle y la "erradicación del tráfico y consumo de estupefacientes". Los vecinos solicitan también "más contundencia de las fuerzas del orden", la presencia de policía secreta y cámaras de seguridad que mantengan vigilada la calle. Entre su pliegue de exigencias figura además la "eliminación de los jardines al ser foco de infección por la basura acumulada".
Como medidas de presión, la Plataforma ya ha solicitado esta semana una entrevista con el alcalde, a la que sumará otra con la delegada de la Xunta en Vigo, Lucía Molares, y el subdelegado del Gobierno, Delfín Fernández. Entre otras acciones los vecinos prevén "manifestaciones con cortes de tráfico en diversos puntos de la ciudad", depositar delante del Concello la basura que ellos mismos recojan en la calle o denunciar su situación con pancartas.
