La Xunta de Galicia y el Eixo Atlántico dan un toque de atención al Gobierno portugués. Casi cuatro meses después de que sellaran un acuerdo en Viana do Castelo para facilitar el pago de los "telepeajes" de la autovía a Oporto a los conductores gallegos, el Ejecutivo luso no lo ha cumplido. "Admitimos que sí realizaron avances, pero queda sin hacer más de la mitad de lo pactado, entre otras cosas que el "chip" recargable se venda en las oficinas de Correos de España", critica el conselleiro de Infraestruturas, Agustín Hernández. De hecho, el compromiso del secretario de Estado de Obras Públicas luso, Paulo Campos, fue que se comercializaría ya antes de finalizar 2010.

El secretario general del Eixo Atlántico, Xoán Vázquez Mao, se suma a la denuncia del Ejecutivo gallego. "Portugal está incumpliendo el pacto. Aunque sí inició la venta del dispositivo Vía Verde en las oficinas españolas del banco Caixa Geral, no así la del aparato recargable previsto para las personas que realizan viajes esporádicos", critica.

El pago de los peajes a través de internet o en alguno de los cajeros de la red Payshop, las dos únicas alternativas que Portugal ofreció a los gallegos para poder abonar en metálico sin necesidad de comprar o alquilar ningún aparato electrónico, no funciona. "Políticamente están aprobados ambos sistemas, pero la realidad es otra. Los cajeros no emiten tique alguno y en internet, a parte de la complejidad del propio sistema implantado, no siempre es posible pagar porque no funciona", resume Mao.

De hecho, y según constató este periódico, ayer era imposible pagar el peaje a través de la página web de Correios (www.ctt.pt). Tampoco se daba la posibilidad de recargar los "chip", opción que el Ejecutivo luso se comprometió a activar y que tampoco se aplicó. Su adquisición es solo posible en Portugal.

Sin respuestas

Fuentes oficiales de la Consellería de Infraestructuras admiten que desde el 11 de noviembre de 2010, cuando se firmó el acuerdo en Viana do Castelo, no hubo nuevos contactos con el Gobierno luso. "Se realizaron llamadas y se enviaron cartas para ver cómo estaban evolucionando las medidas comprometidas, pero no recibimos respuesta alguna", critican. Con este silencio se topó también el director general del Eixo. "La única persona que nos atiende es la de la centralita", ironiza.

"Nosotros nos comprometimos a aclarar en Galicia el sistema de pago implantado en Portugal y a publicitar las formas de pago, y así lo hicimos. Nuestra parte la cumplimos. En todo caso, éste no es solo un problema que afecte a los gallegos, sino a todos los españoles, por lo que queremos que se implique también el Gobierno de España", exige Agustín Hernández, quien asegura que enviará una carta al Ejecutivo luso en los próximos días para urgirle la aplicación de todas las medias pactadas.

Pese al malestar por el incumplimiento de los compromisos por parte de Portugal, tanto la Xunta como el Eixo Atlántico admiten que no tienen conocimiento de que el Gobierno luso esté multando a los conductores extranjeros. "Quizás sigan siendo tolerantes, pero también es cierto que en Portugal circula el rumor de que el sistema no está preparado para leer las matrículas extranjeras", concluye Mao.