La reforma de la calle Celso Emilio Ferreiro depara nuevas sorpresas. Tras el hallazgo de tres fosos defensivos posiblemente castrexos, según las hipótesis de los arqueólogos, y restos de ánforas romanos para almacenar vino del cambio de era (entre los años 50 a.C. y 50 d.C), los operarios que trabajan en la humanización han encontrado, al levantar una losa, una antigua galería.

La arqueóloga que controla la obra, Eva Albaladejo, y técnicos del Concello y Patrimonio Histórico de la Xunta, inspeccionaron ayer el lugar, aunque de momento no es posible entrar en la cavidad. El primer análisis indica que puede tratarse de "alcantarillado de unos cincuenta años de antigüedad", explica Albaladejo. La galería sigue un curso en dirección oeste, hacia el monte, y por el momento la experta no ha hallado material asociado que acredite un elevado valor histórico. También se ignora su longitud, puesto que el estado actual impide acceder al interior. No obstante, la arqueóloga prevé seguir los trabajos y entrar en los próximos días para obtener nuevos datos. La obra se ha paralizado en ese ámbito, por lo que ya son dos los puntos que al menos de momento quedan excluidos de la humanización.

Red subterránea

Pese a los primeros resultados, existen factores que podrían determinar una mayor valía del hallazgo, puesto que ya se han encontrado bajo las inmediaciones de la ladera norte de O Castro galerías conectadas. Los expertos no conocen con certeza el uso de la red y la fecha de creación, pero una de las hipótesis apunta a la canalización de aguas entre el monte y la franja costera.

La construcción de la subestación eléctrica del monte ya dejó al descubierto una conducción vinculada a una tajea y con un pozo de más de 15 metros de profundidad como acceso. Su longitud alcanza los 85 metros. También en la calle Placer apareció una antigua galería, y en Santiago y Granada otras dos respectivamente. La técnica practicada para abrirlas son similares, en algunos casos, a la romana, según constataron los especialistas. Albaladejo descarta que la canalización de Celso Emilio Ferreiro sea tan antigua al señalar que no se encontró material de esa etapa en la zona. Otras actuaciones dejaron al descubierto galerías en el interior del castillo que figuran documentadas en el siglo XVIII.

La obra de humanización continúa ahora en las partes de la calle no afectadas por hallazgos. Los técnicos de la Concejalía de Patrimonio Histórico ya han elaborado informes en los que se resalta la importancia de los fosos y los restos romanos, y proponen una excavación en un área que trascienda los límites de la reforma de la calle. El Concello tomará la decisión en los próximos días.