La Xunta ha anunciado que va a proponer la apertura de un "procedimiento sancionador" al Ayuntamiento de Vigo por incumplir la orden de paralización de las obras de la rotonda del Bicentenario emitida por la Administración autonómica --que afirma haber detectado la falta de control arqueológico en la zona--.

La delegada de la Xunta en Vigo, Lucía Molares, ha advertido de que el no haber parado las obras puede suponer una infracción administrativa que, según la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia, "puede exponer a los vigueses a una sanción económica de hasta 150.000 euros".

Técnicos del departamento territorial de la Consellería de Cultura han inspeccionado en la mañana de este miércoles la zona de las obras para constatar si la orden de paralización había sido acatada, si bien se encontraron que los trabajos en superficie "están prácticamente terminados y que ya no se están ejecutando movimientos de tierras", por lo que concluyen que se ha ignorado la orden y que esta actuación puede constituir una infracción administrativa por parte del Gobierno local.

Así, a la vista del informe de los técnicos y "de la desobediencia de la orden de paralización de las obras", la Xunta ha informado de que "el procedimiento habitual sigue su camino" y se va a proponer "la incoación de un procedimiento sancionador" al Ayuntamiento.

En este sentido, la Administración autonómica subraya que actúa "por responsabilidad" y que le exige a la local "lo que le exige al resto de administraciones, instituciones y ciudadanos".

CUESTION "TECNICA"

Molares ha destacado que el Gobierno gallego "no tiene ningún interés en paralizar las obras de la ciudad y mucho menos la celebración del Bicentenario", y ha insistido en que se trata de una cuestión "técnica" en la que se sigue el procedimiento administrativo habitual.

Finalmente, ha afirmado que, por el momento, en el departamento territorial de Cultura "no hay constancia ni comunicación alguna de los informes arqueológicos de las obras que desde el Ayuntamiento de Vigo dicen que remitieron a la Xunta de Galicia".